viernes, septiembre 30, 2005

Mi piace Pasadena


Ayer salí con Farah de fiesta.
Ya hacía una semana que llevábamos hablándolo, que nos apetecía salir las dos juntas y solas al ataquerrrr... pero siempre que llega el momento nos da un poco de palo.
Pero ayer, a pesar de los incendios, del tráfico y de las carreteras cortadas, hicimos un esfuerzo, nos pusimos guapas y salimos a mi querida Pasadena.
Allí fuimos a parar a un bar que se llama "Mi piace" muy chulo, de esos que nos gustan a nosotras, con gente bien vestidita, machos cabríos guapetones y gente adulta en general (creo que por primera vez en 5 meses no me pidieron el ID cuando pedí una bebida alcohólica, por Dios!).
Farah ya conocía el lugar, porque es donde solía salir su ex novio con sus amigos, y ya venía con la idea entre ceja y ceja de presentarme a uno de ellos, que está un poco "tremens" como diría Núria, pero que precisamente en esta foto, el muchacho no sale muy bien. Es el de la izquierda, un chico moderno donde los haya: se depila las cejas, pero no a lo gay, sino con toda elegancia y tiene una sonrisa de cine.
Pero amigas mías... va a ser que no. Próximo capítulo, ya veremos.

jueves, septiembre 29, 2005

Llueve ceniza


Así es como ha quedado la tarde de hoy desde la residencia universitaria.
Una gran nube de humo, que apenas puede verse donde empieza y donde termina y una gran lluvia constante de cenizas, es lo que estamos viviendo durante las últimas horas.
Las imágenes por la tele son impresionantes...
Empezó ayer como algo "sin importancia" y a día de hoy tan sólo tienen el 5% del área afectada bajo control.


Según dice "El Mundo", estamos a 32ºC (hoy ha hecho un calor que no veas) y 2.000 casas se han visto afectadas y están preparadas para tener que abandonarlas... (ver foto).
Por cierto, me acabo de enterar que la Universidad acaba de cancelar todas sus clases y está cerrando el campus. ¡Me voy a comer!

miércoles, septiembre 28, 2005

Los incendios también llegan aquí


Hoy se ha declarado un incendio bastante importante, muy cerquita de donde vivo yo. En la foto no se pueden ver las llamas, pero sí la enorme cortina de humo que se desplegó.
Es impresionante ver cómo pasan las horas sin poder poner remedio a este desastre natural.
Ya van 17,000 acres quemados, en la frontera entre Los Ángeles y el condado de Ventura y más de 450 personas fueron evacuadas ayer, más otras tantas que serán evacuadas hoy.
Son unos 3,000 bomberos y otros tantos voluntarios los que están trabajando duro para extinguir el fuego lo más rápidamente posible y el viento que se declaró ayer no ayudaba para nada.
Las noticias locales sólo hablan de esto.
Primero fue en mi querida Alcarria y ahora aquí... la verdad es que cada vez que se quema un bosque (si vierais las imagenes son impactantes) parece que se va un poquito de nuestras vidas. Me duele pensar que los desastres naturales nos están dejando sin esa naturaleza que tanto necesitamos. Me gusta lo que escribió respecto a esto Miguel en su blog, el 23 de sept.
Y no hay que olvidar que somos nosotros los únicos culpables de todo esto.

lunes, septiembre 26, 2005

Mi primer persa, con Farah


El domingo Farah me sorprendió invitándome a comer a un restaurante persa, por cierto, delicioso.
Con el rollo de que Farah es un poco árabe, está muy influenciada con todo este tipo de cómida, así que me dejé aconsejar y comimos de fábula. Y nos echamos unas risas con el helado ese de flores que me hizo probar... madre mía qué cosa más rara.
Farah está siendo mi gran apoyo aquí. Desde que Hanne se fue, ella es la que más me cuida y se preocupa por mí y eso es de agradecer. Sé que la echaré mucho de menos.
Supongo que tenemos muchas cosas en común: para empezar, casi la misma edad (ella es sólo año y medio más jóven, aunque no lo parezca), las dos estamos de alguna manera solas en este lugar (sus padres viven en Texas), aunque yo más que ella, tenemos un concepto similar de vida, planes de futuro, etc... aunque también somos diferentes en muchas cosas, creo que las dos nos necesitamos de algún modo (yo más que ella, también).
Además, ella es otra de mis fieles lectoras, a pesar de que tampoco deja posts. ¿Conseguiré algún día que mis amigos, por los cuales este blog sigue cada día su curso, dejen algun comentario para demostrarme que me siguen asíduamente? Porque últimamente sólo los "anónimos" se dignan a dedicar parte de su tiempo en "opinar" sobre lo que leen, lo cual me fascina que, aunque sólo sea para criticar, dediquen parte de su tiempo en mí. Señal de que mi vida les debe parecer interesante ¿no? Si no por qué dedicar ese valioso tiempo que tenemos para comentar sin dar un nombre al que poder contestar... Afortunadamente para todos nosotros, en este mundo tiene que haber un poco de todo, también gente a la que despreciar, si no... ¿cómo podríamos saber apreciar al resto?
Por cierto, me encanta la canción de esta semana (Afroman). No me digáis que no da buen rollito cuando la escuchas. El vídeo no tiene desperdicio... El otro día estuve hablando con Kika y me pidió que le dedicara un post, pues un post no, porque total no me va a leer, que lo sé yo... pero esta canción se la dedico a ella, sé que le encantará.

domingo, septiembre 25, 2005

Toga's Party para el cumpleaños de Ducchie


La idea de ponerme una toga e ir a una fiesta en esas condiciones me aterraba. Odio este tipo de condiciones pero a Ducchie le apasionan, y era su cumpleaños, así que no podía decir que no. Siempre te da la sensación de que irás y serás la única pringada que sigue las indicaciones.
Pero la verdad es que acabé pasándomelo bastante bien. No fue la única, ni mucho menos, aunque no todo el mundo iba vestido.
Farah se dedicó a hacer casi 30 togas, nos juntamos unas 150 personas en casa de Ducchie, fue una fiesta bastante grandota aunque me han dicho que la casa quedó destrozada. Yo me fui de allí como a las 2 y sé que duró como una horita más hasta que vinieron aquí a acabar la noche.
Siento no tener una foto de Ducchie, que era el anfitrión, pero realmente ayer por la noche no estaba como para que le hicieran fotos. De hecho, las que tengo, no se deberían de enseñar.
Quien conozca a Ducchie, sabe de lo que hablo.

sábado, septiembre 24, 2005

¿Dormir? Misión Imposible


Cada vez se hace más difícil dormir en este lugar.
Ya es difícil compartir apartamento con otras 3 chicas que no dejan de ir de fiesta en fiesta noche sí y noche también, que el otro día fue el turno de Daniel, a las 4 de la mañana y algo contentillo, no se le ocurre otra cosa que entrar a "saludarme" y hacerme fotos.
Desde que estoy aquí, creo que no he conseguido dormir una sola noche más de 6 horas seguidas. Los 3 primeros meses fueron para acostumbrarme a la luz que entra por la ventana, y que han hecho que ya sea una experta en dormir con máscara en los ojos.
Después de acostumbrarme a dormir con Hanne, he tenido que acostumbrarme también a otras compañeras de cuarto como la primera que tuve y que no recuerdo su nombre, Cecilia, Hiroko y ahora Nao, que a pesar de ser bastante respetuosas, no pueden evitar hacer ruido cada vez que se acuestan. Aunque tengo que decir que la peor fue Hiroko, que por suerte, sólo estuvo algo más de una semana, pero la chica era un desastre absoluto y siempre me despertaba tanto por la noche como por la mañana.
Ahora Nao, mi nueva compañera de habitación, de Japón, es bastante agradable, pero no puede evitar dedicar una hora por la mañana a su maquillaje diario.
Pero lo que más me cuesta aguantar son las compañeras de la otra habitación, especialmente la alemana, que cuando menos te lo esperas te trae a 3 ó 4 chicos a la habitación o se ponen a hacer palomitas a las 5 de la mañana...
En fin, la pobre Núria me ha entendido perfectamente después de dormir 4 noches en el sofá del comedor. Por cierto, que la acabo de acompañar al aeropuerto, y vuelvo a estar sola de nuevo.
Pero esta noche... esta noche hay fiesta.

viernes, septiembre 23, 2005

¿Qué fue eso?


Ayer, mientras íbamos a comprarme una palangana en el "99 cents store", que es el "todo a 100" de aquí, vimos algo de lo más extrañísimo. Era como un avión, pero dejando un rastro detrás de él, rollo ovni.
Igual es lo más normal del mundo, pero yo como una pringadilla, allí haciendo fotos y tal.
¿Alguien puede decirme qué narices es eso?

miércoles, septiembre 21, 2005

Día de descanso por la Pacific Coast Road


Hoy hemos cogido el coche y nos hemos dirigido hacia el norte, con dirección a Santa Bárbara.
La manera más fácil de llegar es la querida 405, que es mi comodín para llegar a cualquier parte de California. Pero Núria quería ver Malibú, así que lo más conveniente era coger la 1, que es la Pacific Coast Road, una carretera pequeñita (de tan sólo 2 carriles) que va bordeando toda la costa oeste y que si la sigues, te puede llevar hasta Vancouver.
Conducir esta carretera es de lo más bonito, especialmente si lo haces en el atardecer y en dirección Sur, cuando el sol te queda detrás de tí y lo puedes ver a través del retrovisor.
El sol, mi cochecito y esa buena música española que mi prima Diana me grabó es lo único que necesito para tener una tarde de relax y de paz interior (eso o ir al Getty Center).
La verdad es que estoy teniendo sobredosis de relax estos dos últimos días, pero ya lo necesitábamos, después de todo lo acontecido en Nueva York...

Bonitos recuerdos en el lago Cachuma


Y después de ver Santa Bárbara (que a Núria le ha encantado), le he llevado a Solvang, el mismo recorrido que hice hace un mes y medio con mis padres.
Hemos estado en el mismo mirador del río Cachuma, donde saqué esa preciosa foto con mis padres y mi hermano.
Supongo que debido a mis vacaciones, a la presencia de Núria aquí y a otras cosas, mis sentimientos están a flor de piel. Echo de menos a mi familia más que nunca y eso me ha hecho plantearme cosas que no me había planteado antes.
Sé que mi vida aquí es maravillosa y soy una privilegiada por todo lo que estoy experimentando. Soy consciente de que mi estancia aquí es una página importante en mi vida pero me falta mi familia. Me hacen mucha falta.
Echo de menos el charlar con ellos de cualquier cosa que me sucede, pedir consejo, discutir con ellos... Aunque hablamos a menudo, unas 3 veces por semana, un teléfono no da para tanto. Una vez más me doy cuenta de la gran dependencia emocional que siento por ellos y no sé hasta qué punto eso es bueno en mi vida.
Pero con esto no quiero adelantar acontecimientos ni parecer confundida. Sólo es amor de hija.

martes, septiembre 20, 2005

Regreso al Getty, un oasis en el valle de SF


Tenía ganas de enseñarle el Getty Center a Núria, y acerté porque le encantó.
No me canso de ir a este lugar. Es ya la tercera vez que voy y siempre tengo el mismo sentimiento de relax y tranquilidad que me dan estos jardines.
Es el olor, el sonido, el silencio, los colores, todo.
Es mi pequeño oasis en este valle tan aburrido de coches y hamburguesas.

lunes, septiembre 19, 2005

Esto sólo puede pasar aquí...


Nuestro último día en Manhattan ha sido de los más tranquilito. Hemos paseado un poco por el Soho, el Village y hemos llegado a la zona Financiera. Todo paseando para disfrutar por última vez de los paseos neoyorquinos.
La guinda del pastel la han puesto estas lindas cabritas que por un momento he confundido con perros (porque a ver, una no ve cabras todo los días por la Big Apple ¿o sí?)
Ahora ya estoy de vuelta en LA (que menudo contraste), son las 3 de la mañana y hemos tenido sorpresa. Una nueva japo se ha instalado en mi habitación. Ya la conocía porque lleva como un mes viviendo conmigo pero en distinta habitación. Un día os la presento... es de las japos modernas: rubia platino, pelo larguísimo (se dedica a hacerle extensiones a la gente) y de las que lleva mini falda con botas de cowgirl... A Migugonz le encantaría.
La experiencia de NY ha sido impresionante. Algo que recomiendo a todo aquel que disfrute con el ambiente urbano, las prisas, la contaminación, la gente, el arte...
Aspectos a tener en cuenta:
Lo mejor de todo: los chicos (en 5 días he visto lo que no he visto en 5 meses)
Lo peor: que la mayoría son gays y el metro
Y ahora con vuestro permiso, me voy a dormir.

domingo, septiembre 18, 2005

Un domingo en Central Park


Hoy hemos pasado un domingo como auténticas neoyorquinas en Central Park, como Dios manda.
Yo creí que nos iba a sobrar tiempo, pero la verdad es que Central Park da para mucho.
Primero hemos ido al famoso Metropolitan Museum, donde hemos pagado el módico precio de $1 ya que el precio de entrada es "recomendado" así que si eres pobre, como nosotras, nos podemos permitir el lujo de ahorrarnos la pasta para comprar otras cosas, como un jugador de golf que he comprado para mi padre, hecho simplemente con un tenedor. Eso es arte, y lo demás son tonterías.
Pues a parte del Museo, que está bastante bien, todo hay que decirlo, aunque se hace un poco difícil encontrar la salida, nos hemos pateado la mitad inferior de Central Park, que para quienes no lo sepan, es un parquecito con nada menos que 340 hectáreas, que no está nada mal para correr un poquillo o ir en bicicleta, ¿no?.
Hoy domingo, estaba a rebosar de gente por todos los lados. Es la playa de Manhattan... todos en bañador, tomando el sol, o haciendo deportes varios.
Es todo un espectáculo andar por ese parque: te ves a artistas de todo tipo, cantando, bailando o incluso montándote en cuestión de segundos una performance de teatrillo.
Todo curioso y una visita obligada para todo aquel que visite Nueva York.

sábado, septiembre 17, 2005

Chinatown y Manhattan desde Brooklyn


No me digais que no es espectacular.
Los días aquí en NY se acaban y ahora estamos intentando disfrutar un poco más de la ciudad que al principio, que sólo íbamos a saco paco, de aquí para allá mirando cosas.
Nos hemos pasado toda la mañana en el Chinatown intentando comprar bolsos de marca falsos al mejor postor. ¿Qué no necesitamos ninguno de esos bolsos? Totalmente cierto, pero la experiencia hay que vivirla.
Me he llegado a sentir una auténtica delincuente. No sabíamos muy bien cómo funcionanba la cosa, así que nos dirigimos a Canal Street, y allí empezamos a caminar con el tumulto de la gente, que realmente piensas que estás en China, si no fuera porque ves el Empire State al fondo.
De repente pasas por al lado de un personaje que te dice por lo bajini: "quereis Guccis, Pradas, Lous Vuittons..." y nosotras, sin pensarlo, "yes, yes....". Total, que te hacen un gesto de "sígueme, pero en silencio y con discrección"; te llevan a un edificio a la vuelta de la esquina o te meten en la trastienda de un local, normalmente como un búnker de esos bajo tierra de 2 m2 y allí encuentras el tesoro del pirata. Como dice Núria "todo un jari".
Después de comprarle un bolso de Louis Vuitton a mi madre (el ultimísimo que ha salido, lo siento chicas) por $40 y una carterita del mismo por $7, nos fuimos hacia Brooklyn.
Cuando llegamos al lugar (ver foto) nos permitimos el lujo de estarnos una horita sentadas mirando la panorámica que veis, necesitábamos un momento de relax como aquel. Lástima que el día no acompañaba (para variar en estos días).
De allí fuimos a ver la Universidad de Columbia, a la otra punta de la ciudad. (Alucinante).
Luego brevemente pasamos por Lincoln Square, donde Carrie y Mister Big (Sex and the City) iban al teatro a ver uno de esos espectáculos carísimos que ni Núria ni yo podemos pagar todavía...
Y acabamos de nuevo en Little Italy, donde las fiestas de San Gennaro continúan en su máximo esplendor.

viernes, septiembre 16, 2005

Moma: el museo de arte moderno


Como nos dijeron que el viernes de 4 a 8 era gratis, aprovechamos para ir ese día a ver el Moma.
Después de hacer una cola bastante importante (mucha gente pensó igual que nosotras) pero que iba muy rapidilla, entramos al lugar.
No estuvimos mucho, unos 45 minutos, pero la verdad es que nos gustó bastante.
Núria y yo tenemos estilos diferentes. A ella le gusta el expresionismo de Van Gogh y a mi el surrealismo de Magritte. Pero la verdad es que habían otras obras a tener en cuenta. El cuadro de Pollock, por ejemplo, es impactante. El cuadro en sí no tiene nada (foto), más que pintura de diferentes colores tirada sobre un mural. Pero no sé si es por el tamaño, o por la colocación en la sala.
Pasa lo mismo con los Nenúfares de Monet.
También encontramos pintores españoles, sobre todo: Picasso y Miró, que son internacionalmente conocidos. Sólo llegar al vestíbulo del Moma ya te encuentras un cuadro enorme de Miró (foto).

Lennon en Broadway


Y por la noche tocaba ver un espectáculo de Broadway.
Nos tocó hacer 45 minutos en la calle de cola para coger un ticket a mitad de precio (el de Lennon, que es el que decidimos ir a ver, costaba originalmente más de $100) y os podéis imaginar la cola enorme de gente que había en Times Square para sacar una entrada como nosotras, que por los pelos nos quedamos sin. Mientras haces cola te vienen infinidad de personas extrañas (como el del pañal en la foto) ofreciéndote cosas diversas o haciendo espectáculos y demás. Es todo curioso.
Por la tarde nos fuimos a cenar al restaurante "The View", que está en la planta 47 del Marriott Hotel. Es un restaurante de esos que da vueltas y que tiene una vista espectacular.
La comida no mataba, pero los postres eran sensacionales.
Y luego fuimos a ver el espectáculo de Lennon, que lo estrenaron hace escasamente un mes y la verdad es que estuvo de miedo. Nos encantó (foto).
Y para acabar, pensamos ir al barrio chino porque creíamos que por la noche habría lucecitas y tal y sería bonito... pero qué va, no había ni Dios y yo me cagué un poco, así que decidimos irnos a dormir, que cada día acabamos con un dolor de pies y de todo bastante importante.

jueves, septiembre 15, 2005

Dos catalanas en NYC


Parece que ya vamos acostumbrándonos al ritmo neoyorquino. Unos días más aquí y somos las reinas de la ciudad.
Esta ciudad es un estrés... la verdad es que en esta ciudad poca gente entiende que a veces algunas personas también tenemos vacaciones.
El tema "metro" nos ha sacado un poco de quicio, resulta que si te equivocas de dirección y quieres cambiar, no hay trasbordo interno en la mayoría de las estaciones, con lo cual tienes que salir a la calle y buscar el lado contrario, rollo autobús. Pero eso no es lo peor, lo peor es que el ticket no te funciona hasta pasados 18 minutos (os lo juro que son 18). Así que eso nos trae un poco locas, teniendo en cuenta que el metro de aquí es un caos y hay líneas de metro en diferentes niveles y la calor que hace, es para morirse.
Hoy hemos probado unos "hot dogs" de los de $1 (podéis contar), pero no me digais que no es total tomarse uno de esos perritos calientes en pleno Soho, como dos auténticas petardillas.
Hemos estado de visita por el Soho, Tribeca y Greenwich Village, que viene a ser como el Borne de Barcelona, pero a lo grande y mejor. Es el barrio "cool" de la ciudad, donde están las mejores tiendas de esas de ropa extraña, de segunda mano y locales de ambiente y de moda de lo más "chic". Sólo en este lugar puedes encontrar a gente con zapatos de diferentes colores o posters de Tom Cruise en calzoncillos con flechas clavadas por todo el cuerpo, rollo "budú" (podéis ver foto adjunta). También hemos ido a los barrios de Gramercy y Flatiron District, -donde hemos visto el famosísimo edificio ese que hace esquina y con tan mala pata que estaba en obras. Ese edificio fue el más alto del mundo cuando se terminó en 1903 y dicen que provoca importantes corrientes de aire debido a su forma triangular- y Chelsea y Garment District.
Por la noche nos hemos ido a Little Italy a cenar, la idea más acertada para acabar el día. Pues ahora están de celebración, ya que festejan las fiestas patronales de San Gennaro, que vienen a ser como las Fiestas de Gracia, donde la calle Mulberry se convierte en una avenida peatonal que ofrece diferentes artesanías italianas y no italianas, tipo feria con la tómbola y demás (en la foto podéis ver un grupo de señores ya entrados en años, muy divertidos ellos, tocando las tormpetas y trombones). Y por supuesto, hoy no nos hemos perdido el Empire State...

The Empire State: entre la estafa y el espectáculo


Posiblemente lo más emocionante de esta ciudad sea subir al observatorio del Empire State Building, el edificio más alto de la ciudad.
Pues bien, el precio no es que sea demasiado caro, son $14, pero teniendo en cuenta que te tratan como borregos, que las instalaciones interiores están en obras y que lo único que hacen es subirte en un ascensor de mármol hasta la planta 80 para que te hagan una foto mal hecha con un decorado de fondo y te vuelvan a subir a la planta 86 para finalmente ver lo que tanto tiempo llevas esperando.... pues una estafa, la verdad.
Un detalle a tener en cuenta, es que todos éramos españoles, y cuando hemos llegado allí, la niebla, smoke, contaminación, llamarlo como querais, no te dejaba ver ni la Chrysler Tower. La hora era perfecta, justo en el atardecer... pero de nada ha servido esperar, porque apenas hemos podido hacer unas fotos mínimamente decentes.
Ahora eso sí, la vista es espectacular, todo hay que decirlo. En la vida he visto algo igual, sólo sentí algo parecido cuando estuve en lo alto de la torre Eiffel en París, pero de eso hace como 11 años y me queda ya un poco lejos.
Como anécdotas interesantes sobre este edificio, os contaré que su antena, de 62 metros, emite radio y televisión a la ciudad y a otros 4 estados. O que en verdad hay hasta 102 pisos (a 381 metros de altura), pero que no dejan subir ahí, desde donde se podría ver un radio de 125 km.
Y lo que más me ha sorprendido es que cuando se acabó de construir (1931), y debido a la reciente crisis del 29 (el hundimiento de la Bolsa), resultaba tan caro alquilar un espacio que fue sólo gracias a los turistas (que ya son más de 110 millones) quienes salvaron la torre de la quiebra.
Que conste que todo esto es lo que cuenta la guía de Núria... interesante, ¿verdad?.

miércoles, septiembre 14, 2005

Midtown Manhattan y un poco de Times Square


Estamos agotadas. ¿Por qué hacer turismo es tan doloroso?
Núria, por ejemplo, desde que le dio el tirón en el pie al segundo día de llegar a USA parece que no se acaba de recuperar. Y yo... con lo mal acostumbrada que estoy y lo poco que suelo caminar, llegan las 20h y estamos muertas.
Nuestro segundo día en Manhattan, ha sido de lo más increíble.
Hoy sí que que he sentido que estaba en la auténtica Nueva York. Lo de ayer en el Lower Manhattan fue sólo un aperitivo.
Hemos cogido el metro y hemos ido a parar a la calle 42, un poco más al norte. De allí, nada más salir... la torre Chrysler (foto), im-presionante. Se puede decir que desde que destruyeron las torres gemelas, la torre Chrysler y el Empire State son los edificios más emblemáticos que quedan de la ciudad.
Después de ver un montón de edificios impresionantes y altísimos, te das cuenta que ya no impresionan tanto... es decir, supongo que hace 50 años, la gente tenía que alucinar con estas vistas, pero hoy en día, los ves y sólo deseas tener un parque cerca donde poder hacer una foto en la que salga el edificio entero, que no es fácil.
El Rockefeller Center, la ONU (que precisamente hoy era el día de la Asamblea General y no nos han dejado ver el edificio por dentro y no podíamos acercarnos a la mitad de las calles. Pero allí estábamos nosotras, esquivando todos los obstáculos que se nos ponían por delante). Creo que hoy ha sido el día que más policías, periodistas y personas de seguridad he visto en toda mi vida.
Hemos paseado por la Fifth Avenue, hemos ido a Tiffany's, al lado del Trump Tower (foto) para hacernos una foto en la puerta, hemos visto la catedral católica más grande de USA, la de St. Patrick's Cathedral y hemos entrado en la Grand Central Terminal, esa estación de tren donde se han rodado infinidad de películas (foto).
Por el camino hemos comprado un par de bolsitos que había por $5 donde a Núria casi le da algo (foto)... le vuelven loca los bolsos.
Y finalmente, como postre, nos hemos dejado Times Square (foto), y sólo puedo decir: wwuaaawww.

martes, septiembre 13, 2005

Nueva York: un sueño hecho realidad


Desde que ví unas fotos de cuando estuvieron mis padres hace unos 16 años, Nueva York ha sido uno de mis destinos más ansiados, o quizás, el más ansiado.
Hemos llegado esta misma mañana y ha sido un no parar.
Ayer me tomé unas pastillas que me dió mi madre para dormir, porque -por quien no lo sepa y por muy extraño que pueda parecer- no me gusta volar y me pone muy nerviosa. Así que no una no, sino hasta dos pastillas me zampé... y la verdad es que tuvo su efecto. Nos pasamos (Núria se tomó otra) toda la noche dormidas como un tronco, increíble (por mi parte) pero cierto.
El problema es que no contaba conque sólo eran 5 horas de vuelo, así que las dos pastillas hicieron efecto hasta este mediodía que me he tenido que tomar un café o me caía redonda.
Pues bien, nada más llegar y ver los rascacielos, ya te entra un no sé qué que qué se yo... pero parece que hasta que no ves la estatua de la Libertad, no has acabado de de ver NY del todo y no se queda una tranquila. Así que como locas, hemos cogido el ferry hacia Staten Island, que era gratis y hemos hecho uno de nuestros sueños realidad. Qué diferente se ven los sueños cuando uno lo está viviendo en la realidad. Es algo inexplicable que este año me está sucediendo bastante y espero que me vaya sucediendo durante los próximos años de mi vida. Si total, soñar es gratis y tampoco hay que pedir permiso... ¿cuántas más cosas en la vida podemos disfrutar de esta manera?

New York nos estaba esperando


Hemos llegado como a las 8 ó 9 de la mañana a casa de Rob, el amigo de Núria que muy amablemente nos ha dejado su estudio para pasar estos días inolvidables.
Su casa está situada en el "Lower East Side", en plena isla de Manhattan y muy al ladito del Soho y Little Italy.
El estudio de Rob, quien ahora mismo está en España, lo comparte con un amigo suyo (Dan) que es fotógrafo y tiene montado su taller pero no vive allí. Así que estamos Núria y yo solitas en un auténtico estudio de fotógrafo, lo que hace de este viaje un detalle aún más interesante.
Lo dicho, después de conocer a Dan, hemos emprendido nuestro viaje por la parte más sur de Manhattan. Eso ha incluído el Ayuntamiento, diferentes edificios muy monos todos ellos pero que tampoco me acuerdo de lo que eran, la Bolsa de Wall Street, Trinity Church, la zona cero, o lo que era antiguamente el World Trade Center, el World Financial Center y su Winter Garden, el Seaport, donde estaban rodando una película de esas indias (de indios de India quiero decir), el puente Brooklyn, la estatua de la Libertad, etc...
La foto de Núria haciendo el tonto es por culpa de un Margarita "happy hour" que nos hemos tomado para comer y nos ha alegrado un poquito el día... (como se entere de que le he puesto la foto, me mata).
Por la noche Dan nos ha invitado a cenar a casa de su novio. Ha sido una de esas cenas super chulas, en las que hemos hablado de un montón de cosas. La verdad es que son una gente genial, hemos tenido mucha suerte de aterrizar aquí.

Lo que queda del World Trade Center


Llamarme macabrilla... pero lo que más ganas tenía de ver una vez llegar a esta maravillosa ciudad era la Zona Cero, o lo que antes era el World Trade Center.
Cuando te acercas a la estación de metro, que en teoría debería estar debajo de las torres (ver foto) ya te entra un escalofrío y una sensación de vacío (nunca mejor dicho) enorme.
Hay una valla que protege toda la zona, así que para los morbosos como yo nos resulta bastante difícil poder sacar fotos en condiciones.
La verdad es que, sin ninguna duda, este es el sitio que más me ha impresionado.
Cuando llegas allí, lo primero que haces es mirar al cielo e intentar imaginar cómo hace tan poquito tiempo, se alzaban dos torres de alturas increíbles y del doble de tamaño que el Hilton que hay al lado.
Realmente Nueva York está de luto, y lo estará por muchos años más. Pues no es lo mismo ver un skyline sin las llamadas torres gemelas, cuando apenas se podía ver en cada rincón de calle de la parte sur de Manhattan... se hace muy raro y a veces se te olvida de que estás en NY. Se le echa de menos y una serie de fotos conmemorativas recuerdan el momento de la catástrofe donde siguen acercándose miles de turistas, como yo, para tomar una foto que ya forma parte de nuestra historia.

domingo, septiembre 11, 2005

Las reinas de Jólibut


Hoy nos hemos levantado un poco tarde, pero eso no ha sido excusa para ver menos cosas...
Hemos empezado con Bel Air, Beverly Hills, UCLA y Rodeo Drive. Muchas tiendas y muy caras, así que nos hemos conformado con mirar y no tocar.
Luego hemos ido al Farmers Market ha tomarnos un "smoothie" bien fresquito y finalmente hemos acabado en Hollywood, donde Núria tenía unas ganas locas de llegar... Es como si Los Ángeles no fuera lo que es sin Hollywood. Y ya ves, tampoco es nada del otro mundo, ¿no?
La verdad es que a todo el mundo decepciona pero sin embargo, sigue gustando. He llegado a la conclusión que Hollywood tiene su encanto, pero nunca tiene que ver con lo que uno se imagina antes de llegar aquí. Es la segunda parte de "Friquilandia" (el ránking nº1 se lo concedo a Venice Beach, con todos mis respetos) y se compone básicamente de:
- Teatro Chino (donde las manitas y tal)
- Kodak Theater (donde los Oscar y toda la pesca)
- Las estrellitas del Paseo de la Fama
- Otros pequeños lugares a tener en cuenta como el templo masón o el teatro egipcio, que aunque no son tan importantes, tienen su encanto.
Y eso es todo... o igual es que me he perdido algo, que también podría ser.

Momento "pensadora" en el museo de cera


Hemos decidido entrar en el museo de cera, porque ya va siendo algo como típico cuando haces turismo, y mira que siempre es lo mismo... pero así de imbécilas somos.
Pues bien, tengo que decir que el museo de cera de Hollywood es una puñetera estafa de $13 (sin descuento al pobre estudiante) donde en vez de mostrarte figuras de cera, de esas que brillan y tienen un cutis perfecto, te enseñan otras de papel maché (por lo menos), manchadas, medio rotas y que todo parecido con el personaje es pura coincidencia.
Lo mejor del museo es ese hombretón de la imagen, tan grandote él, que quería tomarle una foto, pero claro, no sabía de dónde agarrarle en cuestión... Y una que es muy "shy" ("tímida", para quien todavía no esté tan familiarizado con el idioma) tiene que disimular. Y de buen rollo pero ¿qué coño pinta una escultura griega dorada en el Wax Museum?

sábado, septiembre 10, 2005

Núria ya está aquí...


El viernes pasé un día de lo más aburrido. La espera de Núria se hizo eterna y ya no sabía que hacer para matar el tiempo hasta las 21.30h que llegaba (por cierto, más puntual imposible).
Darío me acompañó al aeropuerto, la última vez que estuve allí fue cuando mis padres vinieron... en el mismo lugar me encontré con Núria, recogiendo las maletas. Qué guay... hace tanta ilusión que alguien te venga a ver... que hasta hoy no me podía creer que ella estuviera aquí.
Hoy nos hemos levantado, hemos comido en la cafetería de la Uni y la he llevado a Venice Beach y a Santa Monica para empezar ya fuerte con el tema "compras". Luego por la noche, nos hemos arreglado un poco y la he llevado a Pasadena, a cenar a un restaurante que Verónica, la austríaca que vive allí me había recomendado. La comida estaba buena, aunque un poco picante... y eso que era Brasileño-Mediterráneo...
Ésos son los 3 sitios que más me gustan a mí de Los Ángeles, mis 3 sitios preferidos. Y hoy los hemos podido disfrutar juntas.
¡Bienvenida cari!

miércoles, septiembre 07, 2005

Triple AAA versus RACC


No hay color.
Dicen que las comparaciones son odiosas y en este caso, podría llegar a ser cierto.
Desde que me compré el coche, tenía ganas de hacerme socia de un Club de Automóvil que me asista en carretera durante las 24h del día. Que ya se sabe que una es un poco torpe y como se le pinche una rueda o se deje las llaves puestas y demás, le entra una situación de pánico que a ver quién lo soluciona.
Así que hoy me he dirigido a las oficinas de Triple AAA, que es toda una entidad aquí en California.
Para empezar, las oficinas, nada que ver con las del RACC. Parece que estés en la consulta del médico. Te hacen sentar en unas sillas y te van llamando por nombre.
A mí me ha llamdo una koreana muy majeta pero que no tenía ni idea y bastante esfuerzo he tenido que hacer para entenderla (yo creo que era el segundo día que trabajaba allí). Por supuesto, no he recibido nada de información, me ha bastado con leerme un folletito que me dice que me dan mapitas gratis y me asisten las 24 horas para decidirme y unirme a este "gran" club.
El precio, nada que ver con RACC, son $66 al año, lo cual está muy bien, pero a nivel de servicios, ni punto de comparación. De hecho, ni siquiera sé lo que me cubre, pero tendrías que ver el folletito de información... Sé que puedo llamar hasta 4 veces a la grúa y sólo me pueden llevar a una distancia máxima de 7 millas (unos 11 km). Así que como me quede tirada en medio del desierto de Nevada, no sé muy bien qué es lo que tengo que hacer...
En fin, ¡me siento perdida sin mi RACC!
Por cierto, con motivo de mi post dedicado al RACC y que ya va siendo hora de cambiar la músiquita de Ms. Kravitz, que está muy bien pero empieza a cansar, me he tomado la libertad de poner esta maravillosa canción que tan buenos momentos nos ha brindado a Migugonz y a mí, y que no olvidemos, fue una de las causas por las que estoy yo aquí... ¿no?
Este es mi regalo de cumpleaños Miguel Ángel... "Richard Chamber" y de gratis.

martes, septiembre 06, 2005

Grrr.... puto TOEFL


Está visto que el TOEFL y yo no somos grandes amigos.
Hoy he recibido una sorpresita. Con una puntualidad inglesa, me ha llegado el resultado del examen de TOEFL, justo dos semanas después de hacer el examen.
La buena noticia, es que he sacado una puntuación bastante más alta de lo que yo esperaba e incluso que Rebekah, la encargada del University Placement esperaba también. La mala, es que no entro en UCLA por 3 miserables puntos. Así que es una sensación extraña, una mezcla de satisfacción y jodienda al mismo tiempo.
Para entrar en una Universisdad convencional, te piden 173, pero para UCLA te piden 213.
Primero, el incidente que tuve hace un par de semanas, ahora esto...
Odio todo lo que tenga que ver con TOEFL...

lunes, septiembre 05, 2005

Cookies para el Labor Day


Se puede decir que desde el viernes por la tarde, estoy de vacaciones.
No tengo que volver a clase ¡hasta el 26 de Septiembre! Son 3 semanas, madre mía, ¡mi vida es de auténtica estudiante!
Hoy ha sido el Labor Day, que entiendo que viene a ser como nuestro Día del Trabajador, así que la escuela ha cerrado, nos ha invitado a pizzas para todos y ha sido uno de esos típicos días de domingo por la tarde, en los que me han entrado unas ganas horrorosas de hacer galletas... Así que le he dado el coñazo a Farah hasta que me ha dado una pasta que tenía ella para hacer cookies y me he emocionado yo sola en la cocina de la residencia.
La pasta ha dado para 20 cookies, que estaban que te cagas, pero que se han ido consumiendo a medida que iba subiendo de planta (estoy en la tercera planta) porque todo el mundo me miraba con cara de cerdito degollado... y yo, que soy tan buena persona iba con mi platito azul, rollo camarera, "Do you want to try?", con esa sonrisa que me caracteriza y que me cuesta tanto aguantarla ante las 2.000 japos que se iban acercando... ¿Cómo hacen para sonreírte a cada momento?
Finalmente he llegado a casa, donde me esperaba Farah, con unas 7 cookies... la tía sólo quería una, pero cada vez que iba al lavabo desaparecía otra... Al final, y a última hora de la noche, ésta es la única cookie que ha quedado... mmm....

domingo, septiembre 04, 2005

Delfines en Malibú


Lo más seguro es que tengais que ampliar la imagen para verlos, pero sí, eso que se vé oscuro al fondo son delfines, en la misma orillita de la playa...
Hoy he cogido a mi más fiel compañero de viajes y me he ido con él a Malibú. La intención era ir a Zuma Beach, pero me he quedado en el camino (Zuma Beach está justo al ladito de Malibú).
He aparcado el coche en el arcén de la carretera, junto con otros tantos y justo allí mismo, he bajado a la playita... ayyy qué gustito. Con mi iPod edición limitada de U2 (que tan generosamente me regaló mi hermano) y unas cuantas gaviotas, me he quedado absorta unas dos horas, antes de que el viento empezara a molestarme un poco.
A veces, me encantan esos momentos de soledad, en los que miro a la gente pasar, y me tomo la libertad de imaginar sobre sus vidas. Me gusta tener tiempo para mí, para mis pensamientos... Mi tiempo, mi libertad y yo. No, no estoy loca, sólo un poco "diferente".
Y ya cuando me iba, han aparecido por ahí, de la misma forma que aparecieron cuando fui a Zuma Beach hace un par de meses con Ducchie, Farah y Hanne. No se ven mucho, pero se sienten, porque toda la gente que está en la playa se pone en la orilla para verlos, como si no los vieran cada fin de semana...

sábado, septiembre 03, 2005

Un sábado en Ventura con Farah


Ya hacía tiempo que queríamos ir a pasar un fin de semana a Ventura.
Ventura está como a una hora al norte de donde vivo yo, muy cerquita de Santa Bárbara. En este lugar vivió Farah hace un par de años, ya que tiene parte de familia viviendo allí.
Pues bien, después de que al final Farah tuviera un fin de semana libre, conseguí sacarla de casa. Lo que iba a ser un fin de semana, ayer se convirtió en día y medio y finalmente esta mañana ha decidido que iba a ser sólo un día... así es Farah, ¡tan imprevisible! Pero ha sido un día de esos chulos, como el de San Diego el 4 de julio.
Hemos cogido MI coche, (que gusto, por Dios!) y carretera y manta.
Ventura es un sitio bastante bonito... ¡y frío!.
Primero hemos ido a casa de su tía, que es esa casa que veis en la foto, típica americana (el 90% de las casas aquí son así. La primera vez que ví una me pareció enorme, pero ahora ya me empiezo a acostumbrar), pero ella no estaba.
Luego hemos ido a la playa y nos hemos relajado por unas horas hasta que hemos ido a comer algo a un restaurante vegetariano y finalmente hemos quedado con unas amigas suyas en un bar chulísimo de vinos. El sitio se llamaba "Wine lovers" o algo así, y era como una cabañita de madera, con una terracita de troncos y árbolitos donde te daban un trozo de pizza recién sacada del horno como aperitivo para el vaso de vino. Un sitio muy particular, donde además tocan música en vivo cuando entra la noche. Quería haberle hecho una foto pero se me ha olvidado.
Y por último, ya de camino, hemos ido a visitar a su primo, que ahora que lo pienso, no ha sido muy apropiado hacerle únicamente una foto a sus pies (ver foto), pero es que me ha parecido tan gracioso...
En fin, un sábado diferente y agradable que me ha dado un buen motivo para actualizar el blog y quitar la foto del dichoso pene, que llevaba ya desde el miércoles.